Hay combinaciones que están prohibidas, que no es sano mezclarlas por el bien de todos como lo es la gasolina y el volante, al agua y el aceite.
Lo que nunca imaginamos es que una mescolanza de chocolate, queso y fría hiciera correr a tanta gente el día de las velitas. Era una simple atención que la dueña de un local comercial de bebidas quería brindarles a sus clientes.
Luego de unas cervezas vestidas de novia llegó el chocolate disfrazado de volcán el cual los animosos clientes que bailaban sin parar decidieron hacer un pare para degustar el detalle de atención. Pasado unos minutos se veía el indio corriendo y el baño de las mujeres era el más apetecido por los hombres, hasta los vecinos continuos al local alquilaron sus baños haciéndose el día de las velitas, una entrada adicional no estaba mal a costilla de la combinación fatal.
Omitimos el nombre del establecimiento para no interferir en su clientela numerosa, pero esta travesía curiosa teníamos que contarla. Unos sobrevivieron, otros se fueron y otros aún no salen del baño.
Como experiencia queda, si va a tomar chocolate y queso, no lo combine con cervezas si no quiere escuchar una sinfónica es su estómago. Cosas curiosas en una noche de velas.