La Fiscalía General de la Nación logró judicializar a Hipólito Enrique Meriño, señalado de sacrificar burros y caballos en un matadero ilegal de la capital de Atlántico. La carne, al parecer, era distribuida posteriormente en tiendas de la ciudad.
Este matadero se encontraba en el barrio Rebolo. En el sitio había 14 animales vivos, seis muertos y varias partes de otros guardadas en congeladores.
- La Fiscalía también encontró algunos libros de contabilidad, en los que se tenían registros de la venta de carne.
El procedimiento contó con la participación de un veterinario de la Secretaría de Salud de Barranquilla.