La Contraloría General de la República se comprometió a impulsar la finalización de la construcción de 128 viviendas que hacen parte de la reubicación de las familias afectadas por el deslizamiento ocurrido en el 2010 en este municipio.
Édgar Ramírez. Hasta el antiguo casco urbano del municipio de Gramalote, en Norte de Santander, que a la fecha solo cuenta con un centro médico, llegó el Contralor General de la República, Felipe Córdoba, para darle el visto bueno al Hospital San Vicente de Paúl, que entrará en servicio después que tardará más 5 años de construcción.
Después de la visita que realizó el Contralor Felipe Córdoba al Hospital, en diciembre pasado, se logró superar el inconveniente de la falta de aprobación del certificado requerido para las instalaciones eléctricas, y quedó habilitado para funcionar.
Esta es la segunda obra que después de ser incluida en el Registro Nacional de Obras Inconclusas, logra reactivarse y finalizarse exitosamente. La primera fue un colegio en Cesar: la Institución Educativa Santa Teresa, en el corregimiento de Puerto Patiño.
“Hoy ya está terminado y ya está listo para su funcionamiento el Hospital de Gramalote, es una gran noticia para el país”,destacó Felipe Córdoba.
La entrega del Hospital se encontraba estancada, entre otras circunstancias, por la no aprobación de las instalaciones eléctricas (RETIE Hospitalario).
“Una vez lograda la energización, con las entidades comprometidas, lideramos mesas de trabajo y visitas de inspección, con la asistencia de la ESE y el Instituto Departamental de Salud IDS de Norte de Santander, con el propósito de lograr la habilitación del Hospital, haciendo que este sueño de la comunidad de Gramalote hoy sea una realidad”, destacó Córdoba.
“Y no vamos a dejar de lado las otras 13 obras inconclusas o elefantes blancos que hay acá por más de 121.000 millones de pesos los cuales le seguimos haciendo seguimiento como tal”, agregó el jefe del organismo de control.
Adicionalmente, la Contraloría General de la República se comprometió a impulsar la finalización de la construcción de 128 viviendas que hacen parte de la reubicación de las familias afectadas por el deslizamiento ocurrido en el 2010 en este municipio.
